Un mar de lagrimas para una tierra seca,
labrar con esfuerzo en un arenal es la paradoja de mi vida, estar donde ya terminó todo,
es el sentimiento que me acompaña en mi día a día ,
ojos que miran solo para llegar a un destino, todos los demás sentidos inmersos en mis pensamientos,
y mis pensamientos inmersos en ti.
Saber por que se está, y estar sin saber, cada momento, oscila en un estado de inopia que me apodera y me abstrae,
vuelvo en si como reacción a un flash inesperado y aturdido,
evado preguntas con respuestas monosílabas, camino y me pierdo entre mis pensamientos que me refugian de lo exterior impregnado de recuerdos,
vivo un bucle de episodios, protagonista y director, me siento con la soledad, única compañera en el cine de mi vida, y ya no importa cual cruel fuese el drama,
me abandonaron los sentidos y lo peor ... ya no se llorar.
Angulo,toda una belleza lo que escribes aquí.Lástima que ahora haya de ausentarme por un tiempo indefinido,pero te agrego hasta mi regreso.
ResponderEliminarUn millón de besos.
Gracias por tu comentario, que al ser de los primeros alcanza un mayor reconocimiento. No dudes que me perderé en tu inarcesible laberinto.
ResponderEliminarPero nunca, "tirar la toalla". Dentro de tí está todo un Universo, ¡descúbrelo!.
ResponderEliminarLa soledad no es mala por sí misma, a mí me ha servido para ser, parte de lo que soy, la he llevado de compañera durante tantos años que yá me llamo Soledad.
Me enseñó a meditar, a pensar, a reflexionar y ahora...¡la hecho de menos, si me falta!.
Encantada de conocerte, te seguiré, no lo dudes. Saludos.
Cuídate un mundo¿lo harás?
ResponderEliminarMil besos.